Dominio del Cair existe gracias al carácter inquieto del bodeguero Juan Luis Cañas. Este proyecto se resume en un fin: hacer grandes vinos en una tierra excepcional, la Ribera del Duero.
Esta bodega nació en 2008 desde la pasión por el viñedo de esta denominación, que Juan Luis recorrió muchas veces hasta encontrar sus viñedos soñados, viñas antiguas, algunas de edad centenaria, parcas en producción pero de carácter generoso.
El edificio de Bodegas Dominio de Cair es moderno, de arquitectura vanguardista, en el que nada es fruto del azar y todo está diseñado para lo que verdaderamente importa, crear vinos de calidad excepcional que en un periodo tan breve de tiempo ya han cosechado premios a nivel nacional e internacional.
Situados en los términos de La Aguilera, Quintana del Pidio, Gumiel de Mercado y Moradillo de Roa, la bodega cuenta con 110 hectáreas aproximadamente entre viñedo propio y controlado, una altitud de entre 800 y 950 metros sobre el nivel del mar, con predominante tierras arcilloso-calcáreas, arenosas y cascajosas.
Los viñedos están controlados minuciosamente durante todo su ciclo para dejar en la cepa únicamente los mejores racimos. Son cepas cuidadas con esmero desde el compromiso con una viticultura racional y el respeto hacia el medioambiente.

En Dominio de Cair, aparte de disponer de un gran viñedo, creen firmemente en la selección.
Selección en la viña: Estudian cada parcela para decidir el momento óptimo de recogida del fruto y su destino.
La mesa de selección: Los racimos son supervisados en una doble mesa de selección. En una primera mesa se seleccionan los racimos de forma manual y en una segunda mesa cada uno de los granos, de manera que sólo los que están en perfecto estado seguirán el proceso para su vinificación.
El objetivo final: Despertar las emociones y hacer disfrutar con cada descorche.